¡Acampe sin salir de la ciudad!

¡Aproveche!, se ha abierto una oportunidad para todos los que estamos un poco hartos del tedio de lo cotidiano en esta ciudad, del trabajo, de cargar con los escombros que deja cada jornada, de las pocas horas que tiene un día o de lo largos que éstos son últimamente. ¿Qué tal una salida sin abandonar la ciudad, que tal un reencuentro con la naturaleza en plena urbe? ¿Qué tal escaparse para reflexionar y de paso contribuir a una causa pacifista? ¿Qué tal acampar en las majestuosas avenidas de la capital mientras drena sus cansados pulmones con el fresco aire de un martes a medio día en Paseo de la Reforma? ¿Qué tal disfrutar de un chapuzón en las calmadas aguas de los ríos viales?... sí, ahora es posible, en pleno Distrito Federal. Demos gracias, en La Ciudad de la Esperanza todo es posible. Plántese ahí, únase, y cuándo escuche un reclamo encolerizado de un transeúnte o un conductor, uno de esos millones de oficinistas, obreros, estudiantes, profesionistas, ruleteros, microbuseros, prostitutas, sacerdotes, yuppies... cuyo tránsito y movilidad se ven impedidos por su plantón -bah! exagerados!-, uno de esos a los que esta modalidad de campamento tanto molesta, recuérdele que no es sólo una nueva manera de vivir en serio la ciudad, a flor de piel o de banqueta, dígale que es por la Patria, por la democracia, por la legalidad... no podrá más que entenderle y sumarse a tan noble causa.